Pensar, hoy no quiero.

Hoy prefiero dejar de pensar 

he pensado tanto,
hoy quiero expresar 
lo que mi mano 
vaya dibujando, 
trazos al azar.

Lentamente, como un niño
que no piensa para pintar
que prefiere un abstracto, 
es decir, su sueño exacto
como haciendo al arte un guiño.

Lentamente como el caracol
que dejando su rastro va
sin pensar si llega o no
o sin nunca llegará.

Hoy prefiero callar
nada expresar, nada no,
el silencio hablará por mi,
hoy no hay nada que decir.

No sé qué me enmudeció
cómo fue, cómo pasó,
pero de repente estoy
que no sé ni a dónde voy.

Y no quiero preguntar
ni tratar de resolver
qué me pudo suceder,
ni si esto es un error,
si pensar, no quiero, no...

Y es que no voy a saltar
ni tampoco a gritar, 
menos a desesperar
por angustia o por dolor
mi vida no voy acabar 
en ningún abismo, no...

Aquí me quedaré 
solitaria no lo sé, 
lo que sienta lo ahogaré
o tal vez lo escribiré, 
y seguro que no es hoy.

Dejaré que sean mis ojos 
los que piensen por mi,
dejaré que sean mis manos 
si es que quieren escribir,
aunque sean poemas vanos
que hablen de mis abrojos,
pero nada de mi puño
porque apenas sí, 
de mi mi alma,
algo, rasguño.

Lyda de Jericó

Agosto 24 de 2017